(1469-1534)Teólogo dominico. Giacomo o Jacopo (Jacobo) 1484 entró con los dominicos del Convento de Gaeta–de donde le viene el apodo de Cayetano– donde tomó el nombre de Tomás, y prosiguió sus estudios de teología y filosofía en Nápoles, Bolonia y Padua.
Fue profesor de teología en las universidades de Paris y Roma, y en este campo adquirió una notable fama tras un debate público con Pico della Mirandola en Ferrara (1494).
Desde 1508 hasta 1518 fue Maestro General. Desde 1508 hasta 1518 consejero de los papas; demostró un gran celo al defender los derechos papales contra el Concilio de Pisa, en una serie de publicaciones que fueron prohibidas por la Universidad de la Sorbona y quemadas por orden del rey Luis XII de Francia.
Dos facetas destacan en su vida:
Está considerado como el más autorizado comentarista de santo Tomás de Aquino. Su Comentario a la Suma Teológica (1507-1522) es un verdadero monumento y origen del renacimiento tomista del s. XVI. De él nace la “nueva escolástica renacentista”, que tan esplendidos frutos dará en España (Salamanca) y Portugal (Coímbra).
Cayetano es también un hombre de Iglesia, un diplomático al servicio de la causa de Roma. Primero como general de la orden (1508-1518), como cardenal (1517) y obispo de Gaeta (1519), y después como legado del papa jugó un papel importante en la política religiosa de su tiempo. Urgió la reforma de la Iglesia en el Concilio de Letrán en (1512). Trató de convencer a Lutero en 1518 y finalmente se opuso al proyectado divorcio de Enrique VIII (1530).
Llamadas a la libertad por la obediencia 